La naturaleza como principal aliada

La energía es la base del proceso. Thermoplay instaló un sistema de paneles solares en la azotea y tres inversores en 2011. En condiciones ideales, los 860 paneles solares son capaces de generar 198 kWp.
Desde su instalación, la energía promedio producida por el sistema supera los 185.000 kilovatios hora (kWh) cada año, lo que permite reducir el impacto ambiental de la empresa al evitar las emisiones de dióxido de carbono asociadas a otros métodos de generación de energía. Además, la energía que produce el sistema se aprovecha íntegramente en el proceso productivo, ahorrando 91.770 kg de CO2 al año.
El 100% de la energía que utiliza Thermoplay es limpia ya que procede de fuentes renovables. El 90% del cual se produce en la región del Valle de Aosta a través de fuentes renovables, como plantas eólicas e hidroeléctricas. El resto es producido por su propio sistema de paneles solares y auto consumo.

Sin desperdicio

Thermoplay S.p.A. utiliza un sistema de recirculación de agua para el sistema de chorro de agua. El sistema permite recuperar el agua residual para que pueda ser reutilizada dentro de la bomba de alta presión donde es filtrada y luego devuelta al tanque de corte.
La capacidad de tratamiento de agua alcanza hasta 670 l/h.

El ciclo del agua

Thermoplay utiliza un sistema de recuperación de agua que utilizan parte de las máquinas del taller. El sistema permite separar el agua del aceite emulsivo y reintroducir la primera en el sistema hidráulico utilizado por las máquinas herramienta.

Iluminación de forma sostenible

El 98% de la iluminación necesaria es generada por fuentes LED, lo que permite una reducción del 60% en el consumo eléctrico.

Elige conscientemente

Thermoplay ha reducido en un 90% el uso de botellas de plástico instalando máquinas de depuración y dosificación de agua conectadas a la red pública de agua potable en envases reutilizables.
Además, vasos y agitadores para bebidas están fabricados con material biodegradable y compostable, mientras que entre los alimentos sólidos se encuentran productos típicos de la agricultura regional valdostana, un importante apoyo en la puesta en valor y conservación del territorio.

Próximos pasos hacia un futuro sostenible